El desarrollo de cualquier proyecto inmobiliario requiere de una importante inversión económica, la cual no siempre tenemos a nuestro alcance. Por eso las constructoras suelen recurrir a los préstamos bancarios a la hora de ejecutar este tipo de proyectos.
Dentro de los mismos, podremos encontrarnos con el préstamo promotor, que es aquel que permite a los promotores inmobiliarios obtener el dinero que necesitan para llevar a cabo la edificación. Y, en este artículo, vamos a hablarte en detalle sobre cómo funcionan, cuáles son sus ventajas y otra serie de características que pueden resultar de tu interés.
Préstamo promotor y sus ventajas en la construcción
Lo primero que debemos hacer es entender con mayor detalle en qué consisten este tipo de préstamos.
Este tipo de instrumentos financieros suelen ofrecer una ayuda económica a corto o medio plazo y su estructuración es diferente a la que podemos encontrarnos en los préstamos hipotecarios tradicionales. Principalmente, porque el préstamo promotor están diseñados para cubrir todos aquellos gastos que se asocian con el desarrollo del proyecto, como puede ser la compra de terrenos, la construcción de las viviendas, etc.
Un producto financiero que ha sido diseñado específicamente para ofrecer la liquidez necesaria a los promotores inmobiliarios o constructoras.
Finalmente, también es fundamental señalar que esté tipo de préstamos no solamente se pueden obtener a través de entidades financieras, sino que también los ofrecen muchas empresas de carácter privado. De hecho, estos últimos se han convertido en una de las alternativas más utilizadas porque los requisitos solicitados son mucho menos exigentes que los que están planteando a día de hoy los bancos.
Qué me permite financiar un proyecto a través de un préstamo promotor
Ahora que conocemos un poco mejor este tipo de instrumentos financieros, es fundamental responder a una pregunta que surge de manera habitual: ¿Qué puedo financiar a través de un préstamo promotor?
Si bien es cierto que están diseñados para financiar proyectos inmobiliarios y de construcción. Dentro de los mismos podemos hacer frente a una serie considerable de gastos, como los que te citamos a continuación:
- Diseño y planificación. En este caso se hace alusión al pago de los profesionales encargados de diseñar el proyecto, como son los arquitectos, ingenieros, etc.
- Costes de construcción. Esto incluye los materiales de construcción, los equipos y maquinarias necesarios para la construcción, el pago de salarios, etc.
- Permisos y licencias. También pueden ayudarnos a cubrir los costes asociados con la obtención de permisos de construcción y otras tasas gubernamentales.
- Infraestructura y servicios públicos. El préstamo promotor también puede utilizarse para instalar sistemas de servicios públicos como agua, electricidad, gas y sistemas de alcantarillado.
- Labores de Marketing: Finalmente, este dinero también podrá emplearse para cubrir aquellos gastos que estén relacionados con la promoción del proyecto, como pueden ser las labores de publicidad y marketing destinadas a atraer compradores o inquilinos, pueden ser financiados.
En resumidas cuentas, se trata de una ayuda económica que puede ayudarnos a cubrir todos aquellos costes que están directamente relacionados con la ejecución de un proyecto inmobiliario.
Conclusiones
Como has podido observar a lo largo de este artículo, el desarrollo de un proyecto inmobiliario conlleva un esfuerzo económico importante y, este tipo de préstamos, son los que permiten a las constructoras disponer de todo el capital necesario, no solo para hacer frente a la misma, sino también para trabajar con los mejores profesionales.
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