NUESTRO

Blog

Contrato de reserva de vivienda, qué es y tipos que existen

2 min.

Si estás pensando en adquirir una vivienda, debes tener claro que, durante el proceso, vas a necesitar gestionar distintos tipos de documentación. Uno de ellos es el contrato de reserva de una vivienda, el cual asegura la venta de la misma, sirviendo como vínculo entre el vendedor y el comprador.

Pero, ¿a qué nos compromete este contrato? ¿Cuál es su cometido? Esas son precisamente las cuestiones que vamos a abordar en este artículo, así que te aconsejamos que sigas leyendo para conocer un poco mejor el mismo.

En qué consiste el contrato de reserva de vivienda

Como su propio nombre indica, se trata de un contrato que se firma con el objetivo de reservar una vivienda que hemos visto y queremos adquirir. De esta forma, este documento implica el compromiso de las partes de llevar a cabo la compraventa sin que ninguna de ellas pueda echarse atrás, suponiendo así un primer vínculo que indica la intención de compraventa del inmueble por ambas partes.

El contrato de reserva de vivienda es un acuerdo donde se asegura una propiedad deseada, comprometiendo a ambas partes a la compraventa sin retractarse. Define precio, plazo, señal y condiciones. Habitual en compras de viviendas nuevas, especialmente sobre plano.

Este documento suele recoger cuestiones como el precio de venta, el plazo de reserva de la vivienda, la cantidad de dinero a entregar como señal para la reserva y las condiciones generales de la venta. Es uno de los procesos más habituales cuando vamos a llevar a cabo la compra de una vivienda de obra nueva, sobre todo si es sobre plano porque aún no están construidas.

Qué modelos de contrato de reserva de vivienda existen

Antes de firmar un contrato de reserva de vivienda, es importante que tengamos en cuenta que existen distintas tipologías que debemos conocer. Veamos las dos más importantes:

  • Contrato de reserva irrevocable: Se trata de un contrato vinculante para ambas partes, por lo que ninguna de ellas puede rescindir el mismo sin incurrir en una penalización.
  • Contrato de reserva revocable: En este otro caso, se trata de un contrato no vinculante, por lo que se puede rescindir sin coste alguno ni para el comprador ni para el vendedor.

Además, también es necesario tener en cuenta que el documento a firmar puede variar dependiendo del momento en el cual adquirimos el inmueble. De esta forma, si la vivienda está en fase de precomercialización, hablamos de una reserva no vinculante, por lo que el comprador puede desistir si lo desea y recuperar la señal abonada.

Mientras que cuando el inmueble se encuentra en fase de comercialización o, lo que es lo mismo, cuenta con la licencia de obra y pólizas de avales, el modelo será distinto. En este caso sí que se incluye el IVA (en el anterior no) y sí se trata de un acuerdo vinculante.

¿Es lo mismo un contrato de arras que de reserva de vivienda?

Es normal confundir los contratos de arras y el de reserva de vivienda, puesto que ambos tienen características muy similares. Sin embargo, no son lo mismo y debemos conocer aquello que los diferencia.

En primer lugar, los contratos de reserva de vivienda suelen realizarse en el caso de los edificios de obra nueva, cosa que no ocurre con los de arras, pero debemos señalar otras cuestiones. Por ejemplo, el contrato de arras tiene como marco legal el Código Civil, cosa que no ocurre con el documento de reserva, el cual tiene menor seguridad a nivel jurídico.

Además, el contrato de arras puede rescindirse asumiendo las consecuencias del tipo de arras firmadas que, por lo general, suele ser una indemnización. Mientras que, en el contrato de reserva de una vivienda, solo puede rescindirse en caso de que se incluya una cláusula con respecto a esto y no suele ser lo más habitual.

Ejemplo de modelo de contrato y documento de reserva de vivienda

Conociendo más a fondo el objetivo de este documento y la necesidad de firmarlo a la hora de adquirir nuestra nueva vivienda, vamos a ver cuáles son los datos que se incluyen de manera usual en el mismo.

Un documento de reserva de la vivienda suele contener la siguiente información:

  • Nombre y datos personales del comprador o compradores y el vendedor.
  • Descripción detallada del inmueble: incluyendo desde la dirección hasta la referencia catastral, superficie y cualquier dato que se tenga con respecto a la misma.
  • Importe de la señal de compra de la vivienda.
  • Forma de pago: el documento debe reflejar cómo se abonará el resto del precio de la vivienda, así como el reparto de gastos entre comprador y vendedor.
  • Cláusula de rescisión: como hemos comentado, no es muy habitual que se incluya, pero puede hacerse.

Se trata de un documento relativamente sencillo y cuya lectura no entraña demasiada dificultad, pero es importante que lo comprobemos bien antes de firmarlo.

Conclusiones

El proceso de compra de una vivienda conlleva la gestión de mucha documentación que garantice la legalidad del proceso, además de los derechos y deberes de ambas partes.

Esperamos que este artículo haya servido para aclarar aquellas dudas que tuvieras sobre los contratos de reserva de vivienda y recuerda que en Grupo Jamsa estamos para ayudarte a resolver cualquier cuestión relacionada con la compra de alguna de las promociones que tenemos actualmente disponibles a lo largo de la geografía española. No lo dudes y contacta con nosotros.